Todo sobre las cintas express y cómo elegir

Las cintas express son un elemento indispensable dentro de nuestro equipo de escalada y la cadena de seguridad. Tienen la función de unir la cuerda a los seguros en la roca, evitando los “zigzag” de la cuerda para optimizar su recorrido, lo que reduce el roce con la roca y los propios seguros.

Pero, las cintas express, ¿para qué sirven? Permiten disminuir la fuerza de choque en caso de una caída y, a su vez, dar mayor libertad de movimiento al escalador, lo que es muy importante en rutas largas y también de escalada con seguros móviles al optimizar el desempeño o resistencia de estos, o también en escalada deportiva de dificultad.

Las cintas express van asegurando al escalador en la medida en que “puntea” una ruta. Sin embargo, si queremos hablar en serio acerca de “seguridad”, ¡usa siempre tu casco, no como la chica en la foto!

FORMA

Las cintas express se componen de dos mosquetones “simples” o del tipo B (básico) con forma D, unidos por una cinta textil cosida elaborada con Nylon o también Dyneema. Tienen en un extremo una parte fija que generalmente va con una goma, cuyo objetivo es que el mosquetón inferior no se gire para facilitar pasar la cuerda, y en el otro extremo un orificio de unión más ancho, que ayuda a que el mosquetón que va en la chapa se posicione y trabaje de buena forma independientemente del movimiento que tenga la cinta cuando estamos escalando.

RESISTENCIA

Todos los elementos que componen una cinta express -tanto cintas como mosquetones- tendrán una resistencia mínima de 20kn (ver certificación) y los mosquetones una resistencia mínima de 7kn en carga transversal en su eje menor o con gatillo abierto.

Las cintas express van en el porta-equipo del arnés.

CARACTERÍSTICAS

A la hora de escoger cuál comprar o utilizar, es importante considerar las características de cada tipo de cinta express, según el tipo de escalada que practicaremos.

1. LONGITUD

Las cintas express largas más usadas van desde los 10 cm hasta los 25 cm. Es importante mantener un surtido variado, que permita una mejor adaptación a las distintas posiciones de los seguros.

También hay que mencionar que dentro del equipo de cintas es necesario incluir un par de cintas runners de 60 cm para escalada monolargo; unas 4 o 5 para multilargos y varias más si realizamos escalada tradicional en terreno de aventura donde el recorrido de la cuerda no es lineal.

2. MOSQUETONES

Ya mencionamos que se utilizan mosquetones básicos sin seguro del tipo D; estos pueden tener gatillos curvos para facilitar el clipear la cuerda y recto para chapar el seguro a la roca. También podemos encontrar con gatillo macizo o con alambre.

Es importante comentar que los gatillos de alambre disminuyen la apertura involuntaria como el Whiplash (latigazo), por ejemplo, al golpear el mosquetón contra la roca o la chapa en un vuelo, o también el Gate Flutter “aleteo” o apertura del gatillo por vibración del roce de la cuerda con el mosquetón en el vuelo, lo que en ocasiones puede resultar un factor de seguridad determinante para algunas situaciones como cuando hay vuelos muy largos o fuerzas de choque muy altas.

Recordemos que en un mosquetón con gatillo abierto su resistencia se disminuye a 1/3 con respecto a su carga óptima en el eje mayor (por ejemplo: 21kn en el eje mayor disminuye a 7kn con el gatillo abierto para la mayoría de los casos). Es importante mencionar aquí que algunos modelos especiales de mosquetones ofrecen resistencias un poco mayores en cargas transversales o con gatillo abierto, lo que también constituye un punto de consideración relevante si disponemos de presupuesto.

¿Cuántas usar? Una escalada deportiva sencilla de monolargo debiera requerir de entre 12 y 15 cintas express.

3. MATERIALES

El peso y la durabilidad también son un factor a considerar en este elemento, y así conseguir las mejores cintas express. Los mosquetones livianos con mayor porcentaje de aluminio resultan mejor para cintas delgadas de Dyneema y están más indicados para usos en rutas alpinas, rutas multilargo o escalada tradicional, en donde el peso a trasladar en la mochila por las caminatas de aproximación o en la escalada misma es un gran factor a tener en cuenta.

Sin embargo, al tener mayor porcentaje de aluminio, su desgaste es mucho más acelerado, a diferencia de lo que ocurre con los mosquetones más pesados (compuestos con una mayor cantidad de acero) que resultan más indicados para escalada deportiva monolargo, en donde su uso es más frecuente e intenso (por los vuelos) y que, en su mayoría, van combinados con cintas de Nylon (poliamida).

Con respecto a esta diferenciación debemos considerar que la tendencia general es que el equipo de dyneema con mosquetones más livianos tiene un valor de mercado más caro que las cintas de nylon con mosquetones pesados.

4. DISEÑO

Fuera del color o la forma, en este aspecto el factor más importante es la facilidad de clípeo en la cuerda y/o chapaje en el seguro, como también hay modelos que ofrecen menos “propensión” a girarse o trabajar “mal”.

Podemos encontrar cintas express de escalada que resultan más ergonómicas y ofrecen mayor comodidad al incorporar cintas gruesas o incluso mango de goma para poder tirar del seguro en caso de ser necesario (como, por ejemplo, cuando trabajamos una ruta o queremos hacer un paso de artificial).

Otra característica es el uso de mosquetones sin “diente” o nariz, la cual en ocasiones se engancha en lugares que no queremos. Como todo, nuevamente aquí existe una relación directa de ergonomía o comodidad v/s precio.

RECOMENDACIONES

Las mejores cintas express deberían guiar bien la cuerda evitando que los mosquetones se giren o trabajen en cargas no recomendadas. Busca los modelos que te brinden más confianza y seguridad.

Cantidad recomendada: entre 12 a 15 cintas express de longitudes variadas para rutas monolargo de entre 20 m y 35 m, y hasta 18 cintas para rutas multilargo considerando largos de 40 m a 60 m.

Ojo con las cintas express que queden colgando sin dueño en la roca. ¡Si no conoces su historia, mejor no confiar en ellas!

PRECAUCIONES

Al alargar la cinta express, procura siempre que el mosquetón superior (o de gatillo recto) sea el que va a la chapa. El roce de metal con metal (chapa-mosquetón) hace que este mosquetón en ocasiones sufra “melladuras” o filos cortantes, los que pueden dañar la cuerda en un vuelo si chapas con el mosquetón cambiado, es decir, si pasas la cuerda en el mosquetón que va a la chapa (superior) y si pasas el mosquetón inferior por la chapa.

Otro factor de atención, son las cintas permanentes dejadas en las rutas. En algunas rutas de dificultad, podemos encontrar cintas permanentes dejadas por otros escaladores. Debemos poner atención a su estado, ya que los vuelos constantes hacen que estos mosquetones también generen bordes cortantes.

En estos casos también es necesario considerar la exposición natural a los factores ambientales (radiación solar, temperatura, humedad, etc.) que provocan un desgaste en las cintas que no siempre es visible… ojo ahí.

¡Atención! ¡He aquí dos situaciones de peligro! Foto: Francisco Rojas.

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¿CUÁNDO REEMPLAZAR UNA CINTA EXPRÉS?

Considerando un uso y cuidado óptimo, es recomendable reemplazar las cintas express según la frecuencia de uso:

• 10 años en caso de uso esporádico o sin uso (una vez por mes)
• 5 años en caso de uso medio (4 días al mes)
• 2 a 3 años si se utilizaron de forma frecuente (2 a 3 veces por semana)
• 1 año en caso de uso intenso (4 veces por semana o más)

También es recomendable renovarlas cuando:

• Han recibido cargas fuertes como, por ejemplo, en una caída o vuelo cercano al factor 2.
• Si se observan signos de desgaste del mosquetón, es decir, si se ha gastado el testigo o “labio” del borde para algunos diseños, o bien se ha gastado en más de 1 mm en el punto de contacto con la cuerda.
• Cuando el mosquetón que va a la chapa muestra melladuras profundas o tallados
• Cuando el gatillo de un mosquetón se siente muy flojo, se traba o no vuelve a su posición normal de cierre, aun habiendo usado lubricante.
• En situaciones de caídas en las que un mosquetón trabaja de manera diferente a su forma de trabajo óptima. Por ejemplo, en caso de haber sufrido una caída (vuelo) con el mosquetón en carga transversal o en una situación de carga no adecuada. Atención en vías y chapas que dejan los mosquetones trabajando en “palanca”, ya sea contra la propia chapa o contra alguna protuberancia de la roca.

Esto puede hacer que el mosquetón reciba la carga del vuelo con el gatillo abierto o en carga lateral, lo que incluso podría hacer que el mosquetón se rompa (aunque no es frecuente, se sabe de algunos casos en Chile y también de escaladores famosos). Otra situación muy común en este aspecto se produce cuando hay chapas atravesadas o giradas, o bien chapas artesanales de perfil cortado; esto deja más expuesto a que el mosquetón de la chapa reciba una carga no adecuada.

El ejercicio reiterado hará que la acción de “clipear” se vuelva fluida, fácil y natural.

CUIDADO

Por último, mantén tu equipo limpio, guardado en un lugar sin humedad y no expuesto a la excesiva radiación ni temperatura, aislado del polvo y agentes químicos, como también de la corrosión. Esto incluye la salinidad de ambientes costeros.