Mosquetones: orígenes, evolución y cuidados

4.9
4.9 de 5 estrellas (15 valoraciones)
Consejos mosquetones de escalada

¿Qué tanto sabes sobre uno de los íconos de todo montañista y escalador?

Los mosquetones —al igual que el piolet, los crampones y la cuerda— son íconos fácilmente reconocibles y naturalmente asociados a la actividad de montaña. Desde su invención, hace ya más de un siglo, se han vuelto fundamentales en toda disciplina montañera: desde simples usos como, por ejemplo, conector en un pasamanos, hasta complejas maniobras de rescate en paredes de hielo y roca verticales. Sin duda, es fundamental saber cómo elegir los mosquetones, cuándo y cómo usarlos, porque, a pesar de ser un elemento ampliamente utilizado, no sirve “para todo”, siendo común ver errores en su elección y aplicación.

usos de los mosquetones

usos de los mosquetones

USOS DEL MOSQUETÓN

Los mosquetones se utilizan principalmente para:

  • asegurar
  • realizar descensos controlados (rapel)
  • ascender por cuerdas fijas
  • autoasegurarse a reuniones o líneas de trabajo
  • pasar la cuerda por seguros intermedios.

Es decir, tienen la fundamental misión de conectar todos los puntos que componen la cadena de seguridad. Si falla uno, es probable que falle el resto o parte de la cadena.

historia de los mosquetones de escalada

BREVE HISTORIA DE LOS MOSQUETONES

¿Quién inventó los mosquetones? Los mosquetones fueron diseñados inicialmente de manera muy simple como grandes anillos de acero en la segunda mitad del siglo XIX por bomberos del estado de Baviera (Alemania) para sus diferentes maniobras. Fue en 1910 cuando Otto Herzog, escalador e inventor, se percata de su uso por una brigada de bomberos y lo adopta en la escalada.

A pesar de su amplio uso en la escalada, no fue hasta pasados los 1960’s que comenzaron a ser homologados por la UIAA (Unión Internacional de Asociaciones de Alpinismo) para cumplir con estándares de seguridad mínimos ¡Hasta ese entonces aún no existía normativa para su elaboración!

Se determinó fijar como piso un aumento en la resistencia estableciendo un mínimo de dimensiones “bastante alto” en sus ejes longitudinales y transversales.

Cabe mencionar que las distintas variantes en montaña que requerían del uso de estos conectores —casi todas— se desarrollaban con material informal y no testeado; derechamente “caseros”, los que se fueron “mejorando” con el tiempo, al menos en lo que respecta a peso, dando importantes pasos como el diseño del primer mosquetón de aluminio en 1939, pero que no contaban con ningún tipo de ensayo que garantizara -en términos de seguridad- un comportamiento adecuado.

tipos de mosquetones

Imagen: Adolfo Dell Orto.

EVOLUCIÓN DE LAS NORMAS DE SEGURIDAD DE LOS MOSQUETONES

Ahora bien, en cuanto a brindar seguridades mínimas y considerando lo anterior, dejaban mucho que desear y, entendiendo además que no existía un mercado importante, no existía realmente la necesidad de desarrollar el tipo de materiales que cumpliera con lo fundamental: balance entre seguridad y peso. Sin embargo y, ante la masificación posterior que requeriría producir grandes cantidades, la UIAA determinó que los nuevos mosquetones debían ser fabricados con un mínimo en su eje longitudinal de 22 kilonewton (kn) (0) y en el eje transversal de 11 kn. Tremendamente seguros; tremendamente pesados.

No sorprendió que el incremento en el peso trajera como consecuencia que montañistas y escaladores siguieran empleando mosquetones sin homologar por ser más ligeros. Además, los registros de accidentes en montaña pasaban en general por otros aspectos, tales como falla en clavos de roca, anclajes y cuerdas (1), entre otros. En conclusión ¿Para qué tanto peso si con lo que hay sirve?

Antiguo mosqueton de escalada

Antiguo material de escalada. Foto: Barrabés.com.

Por lo mismo y, con la aparición en el mercado montañero (ya había sido desarrollado décadas antes (2)) del resistente y liviano aluminio 7075 —conocido también como Zicral—, una aleación de aluminio y cinc, que confiere mayor resistencia a la fatiga que otros metales siendo más liviano, es que la UIAA decidió rebajar la resistencia transversal a 9 kn, reduciendo considerablemente el peso de los nuevos mosquetones. Todavía, estudios posteriores demostraron que la actividad misma podría permitir una nueva rebaja en el peso ¿Cómo así? simple: el dinamismo de las cuerdas, cintas y técnicas de aseguramiento disminuían la fuerza de choque (carga) sobre los mosquetones, por lo que aún podía seguir optimizándose el peso en el material.

Finalmente ¿Cuál es el mínimo de resistencia de un mosquetón?

Tomando en cuenta los puntos anteriores, se permitió que los nuevos mosquetones fueran fabricados con una resistencia de sólo 20 kn en su eje longitudinal y 7 kn en su brazo transversal.

¿TODOS LOS MOSQUETONES CUMPLEN LA NORMA?

En el proceso de producción industrial las muestras pueden tener leves diferencias entre una y otra, por lo que en una entre 100 al azar, la media debía ser 20 kn. En un principio, una de estas muestras aleatorias podía ser ligeramente superior o inferior, por lo que no había garantía absoluta de que existiera un estándar con el piso de 20 kn mínimos, aún cuando fuera muy baja la diferencia. Afortunadamente, el proceso de fabricación fue cambiando en cuanto a exigencias, de manera que asegura que todas las muestras estén siempre por sobre la norma que exige esta base mínima de resistencia. En otras palabras, en el proceso de muestreo, la peor de las muestras siempre va a estar por sobre los 20 kn.

INTERESANTE, PERO…

Las normas de seguridad fueron establecidas considerando factores externos a su fabricación, es decir, a las maniobras o técnicas que se utilizan durante la actividad. Por eso, a pesar de que su resistencia es alta, puede verse afectada si no se cumple con los aspectos relacionados con el dinamismo durante la escalada, además de otros agentes como: montar sólidas reuniones, evitar roces en la cuerda que aumenten la fricción y, con ello, la fuerza de choque, aplicar técnicas para dinamizar las caídas, entre otros.

Afortunadamente, estos temas recaen en el mismo escalador, por lo que, si se hacen las cosas bien, no debieran existir problemas, pero…exacto, hay otros factores que van más allá de la resistencia en caso de caídas “limpias”, por mucha atención que se preste al dinamismo.

CUIDADOS Y PELIGROS AL UTILIZAR LOS MOSQUETONES: EXPERIENCIA PERSONAL

El emplazamiento de los mosquetones sobre el terreno es un asunto fundamental al momento de emplear estos dispositivos. Se debe escoger superficies limpias, lisas, desprovistas de irregularidades importantes, salientes rocosas o simples “porotitos”. El torque o palanca sobre los ejes puede también hacer que fácilmente se abra o, peor aún, se reviente debido a una carga producida por una caída, incluso de una altura menor, pero suficiente para fatigar el material haciendo que falle.

Mi experiencia de cuando mi mosquetón se rompió

Hace bastante tiempo, durante una escalada en el sector de las Chilcas, el autor de este artículo sufrió una caída entre chapas —es decir, dentro de rangos absolutamente normales— y, durante la maniobra de aseguramiento y posterior frenado, experimentó la rotura de uno de los mosquetones de un conjunto exprés (gatillo inferior, curvo). Naturalmente, cayó algunos metros más, pero sin consecuencias de ningún tipo, más allá del esperable susto y el cuestionamiento propio al material empleado.
El mosquetón presentaba una deformación evidente en el gatillo, abriéndose como si se hubiera confeccionado con plástico ¿Cómo se pudo haber abierto así? En en el momento de “calentura” sólo hubo “palabras no amables” hacia aquella marca, pero con el tiempo y, tras comprender el fenómeno de los mosquetones con gatillos abiertos, comprendió el origen del problema: el gatillo curvo se abrió porque fue apoyado sobre una superficie muy irregular, provista de múltiples rocas y agarres (propia de la roca del sector), generando una apertura de éste, bastando sólo una simple caída para que el material se fatigara, deformara como plástico y, finalmente, se fracturara. Un susto que bien vale la pena poner como ejemplo para poner doble atención.

consejos de uso de mosquetones

CONSEJOS PARA EL USO SEGURO DE LOS MOSQUETONES

Aunque lo que viene a continuación está más relacionado con escaladas más comprometidas, con aseguramientos y reuniones aéreas y en altura, es una guía fundamental para entender el extremo a lo que se pueden ver sometidos los mosquetones y, por añadidura, todos los elementos que componen la cadena de seguridad.

  • Evitar SIEMPRE el factor 2 en caídas.
  • Proteger todas las caídas para que sean menor a factor 1, como cuando se sale de una reunión.
  • Mantener siempre el dinamismo en el aseguramiento, para que así las caídas sean lo menos “bruscas” posible con los mosquetones.
  • Colocar siempre los mosquetones procurando que el gatillo por donde pasa la cuerda esté apoyado sobre una superficie lisa, sin resaltes o “porotitos” que puedan abrirlos accidentalmente.
  • Evitar superficies o resaltes horizontales que puedan generar un brazo de palanca sobre los ejes.

Estas medidas de seguridad son simples, pero requieren del cuidado y permanente atención de los escaladores y montañistas. Por último, te recomendaría tratar de evitar repetir frases, tan acuñadas en el ambiente, tipo “no pasa nada, ya lo he hecho así muchas veces” o “quedó piola igual”, ya que nos pueden hacer restarle importancia a estos fundamentales puntos.

datos de los mosquetones de escalada

(0):*Kn es la cantidad de fuerza que se aplica durante 1 segundo a una masa de 1 kilogramo para que adquiera la velocidad de 1m/s respecto a la velocidad coloidal que tenía previo a esa fuerza: https://es.wikipedia.org/wiki/Newton_(unidad)

(1): Seguridad y Riesgo, Pete Schubert, Ed. Desnivel.

(2): https://es.wikipedia.org/wiki/Zicral


¿Cuán útil te pareció esta información?

Haz click en una estrella para otorgar nota

Comentarios

Quiero que me avisen de nuevos comentarios
Notifícame de
guest
10 Comentarios
Más recientes
Menos recientes
Inline Feedbacks
View all comments